Según la gravedad, el árbitro puede conceder un tiro libre directo o bien indirecto; sólo en el primer caso el jugador puede tirar directamente a portería. Las faltas graves cometidas por un defensor dentro de su área se sancionan con penalti, es decir, con un tiro directo desde el punto del penalti, a once metros de la portería, con independencia del lugar del área en que se haya producido la infracción. Unas pequeñas áreas de esquina, delimitadas por un radio de un metro desde el banderín, señalan el córner; en cualquier punto de esta superficie se coloca el balón para realizar el saque de esquina. Corresponde a los delanteros marcar los goles; son rápidos y muy hábiles con el balón en los pies y han de tener buena capacidad para el desmarque. Son calificadas de falta una amplio número de conductas antideportivas y acciones agresivas o antirreglamentarias: entradas por detrás, juego violento y peligroso, obstrucción al jugador atacante, agarrones, patadas, zancadillas, agresiones físicas y verbales, protestas, controlar el balón con la mano, etc. Además de la sanción contra el equipo, las conductas antideportivas pueden ser castigadas individualmente con tarjeta amarilla o roja, dependiendo de la gravedad de la acción. En casos que el árbitro considere muy graves, camiseta españa 2006 un jugador puede ver la tarjeta roja directa.
La función principal de los dos jueces de línea o asistentes es la de señalizar con su banderín si un jugador se halla en fuera de juego; también indican cuándo ha salido del terreno de juego la pelota y qué equipo debe realizar el saque de banda, el saque de esquina o el saque de puerta; además, levantan su banderín para señalar cualquier falta, aunque es el árbitro quien toma la decisión final. El árbitro principal vigila que el encuentro se desarrolle con arreglo a las normas que rigen este deporte, sancionando las acciones punibles, controlando el tiempo de juego (y sus interrupciones por causas no ordinarias) y dando validez o anulando los tantos marcados. Como en otros deportes colectivos de pelota, el objetivo del juego es introducir el balón en la portería que defiende el equipo adversario; resulta vencedor el equipo que, en el transcurso del partido, marca un mayor número de tantos o goles. El dominio del balón con el pie es fundamental en el fútbol, ya que permite realizar regates, pases o disparos a portería. Cuando el balón sale por la línea de fondo por una acción de los atacantes, camiseta españa segunda equipacion el portero el equipo rival efectúa un saque de puerta con el pie.
Si el balón es arrojado fuera por los defensas o el portero, corresponde al equipo atacante efectuar un saque de esquina o córner, que se lanza con el pie desde la esquina más próxima al lugar por el que haya salido el balón. Todos los jugadores han de dominar tanto las técnicas de control del balón como las de conducción. Tanto hombres como mujeres encuentran en este deporte una oportunidad para demostrar su talento y pasión por el juego. Aun siendo incontables las personas que ya desde la infancia y en las escuelas se ejercitaron y siguen ejercitándose en este juego, el título de «deporte rey» que el fútbol ostenta desde hace muchas décadas se debe no tanto al número de practicantes como a los cientos de millones de seguidores que acuden a los estadios y siguen las retransmisiones televisivas y la actualidad de las competiciones. Esto, debido a la violencia, los pobres espectáculos, y a la incomodidad en los estadios donde se juegan los partidos de la Liga Nacional. Otros históricos del fútbol son los húngaros Ladislao Kubala y Ferenc Puskas y el hispanoargentino Alfredo di Stéfano, todos ellos jugadores de la Liga española durante la década de los sesenta; Eusebio, la perla negra portuguesa; Garrincha, el mejor regateador de todos los tiempos; Franz Beckenbauer, el líbero de la gran selección alemana de 1974; Johann Cruyff, la figura del Ajax y de «la naranja mecánica», sobrenombre que recibió el combinado holandés; Diego Armando Maradona, el gran dominador de la década de 1980, cuya genialidad ha llegado a competir con la de Pelé en los foros de especialistas del fútbol; y, ya en el siglo XXI, Lionel Messi, el concentrado, hábil y veloz delantero del Barcelona.
A partir de entonces, su práctica se expandió por toda Europa y Latinoamérica, implantándose de modo definitivo entre la última década del siglo XIX y la primera del XX. A nivel de clubes, el torneo que más relevancia tiene es la Champions League (llamada Copa de Europa hasta 1992). Contra lo que sugiere su nombre (Liga de Campeones), participan no solamente los campeones de los distintos países europeos, sino también los primeros clasificados de las ligas más potentes. Al campeón se le otorga acceso para participar en rondas previas de la UEFA Europa League si no clasifica por otro medio a otra competición europea o a la misma. En la historia de esta competición han destacado las selecciones de Brasil (con cinco títulos mundiales), Italia, Alemania (ambas con cuatro), Argentina y Uruguay (dos). El Campeonato Mundial de Fútbol (también denominado Copa del Mundo o Mundial) se celebra cada cuatro años y enfrenta a las selecciones nacionales de los países que logran la clasificación en las fases previas, organizadas por las confederaciones continentales. La Copa Libertadores puede considerarse el equivalente americano de la Champions League.